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La tercera entrega comunitaria del año, esta vez, tuvo por protagonistas a un nuevo grupo de niños y adultos, oriundas de la ciudad y alrededores, quienes se encontraron en El Caldero, espacio en donde se dictan clases de teatro para todo público y de coro para mayores.
Con la gustosa presencia de su director, Daniel Lambertini; autoridades de nuestra O.N.G., integrantes del Servicio Social del Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur y socios protectores de apellido Monte, se inició la tan esperada donación de sillas de ruedas, necesarias para sus ocupantes, quienes deseaban mejorar su calidad de vida.
Acto seguido, el equipo de CILSA encabezado por la Lic. Lucrecia Albornoz brindó a cada familia sugerencias y consejos sobre cómo cuidar las unidades, el estado físico de cada uno y a qué lugares acudir en caso de ver vulnerados los derechos entregándoles una pequeña guía.
Para cerrar, Virginia Landi, del espacio anfitrión, ofreció una cálida interpretación del poema “Alegría” de Pablo Neruda, y el señor Lambertini, por su parte, recibió un diploma de agradecimiento por su solidaridad.