El oriundo de Mar de Ajó crece como conductor televisivo. A diario está al frente de «Nosotros a la mañana» en Canal 13, y «Con amigos así», en el Canal KZO. El hermano de Victoria, que tiene una discapacidad motriz, dialogó en exclusiva con CILSA y la Gente.

Si hay un mundo fantástico para Joaquín «Pollo» Álvarez ese es el de la televisión. Un medio de comunicación en el que se siente como «pez en el agua» y lo tiene como conductor de dos programas diarios: «Nosotros a la mañana», en Canal 13, y «Con amigos así», en Canal KZO. «No puedo estar más feliz», afirma el oriundo de la balnearia y turística ciudad de Mar de Ajó.

Claro que, este presente fue logrado con mucho tesón y perseverancia. «Cuando empecé a trabajar, tenía que hacerlo de otra cosa. Porque no me alcanzaba la plata para vivir y no me podía mantener. Lo que iba sucediendo y sucede hasta el día de hoy es que, cuando te cuesta mucho una cosa y querés tanto algo, vas logrando pequeñas cosas de las cuales te vas agarrando para ir construyendo tu carrera», admite el esposo de Estefanía «Tefi» Russo, pronto a cumplir 37 mayos.

Si bien está muy enamorado de la cocinera que llevó al Registro Civil el 7 agosto de 2019, «Pollo» cuenta que la mujer más importante de su vida es Victoria, la menor de sus cuatro hermanos, que nació hace 27 años con meningitis y salmonella, por lo que tuvo que pasar años internada y ser sometida a más de 25 operaciones. Al respecto, el taurino dijo alguna vez que «Con ella, vi la muerte setenta veces. «Me rompió todo, pero también me armó».

Joaquín, ¿qué te enseñó Victoria? 

Mi hermana me enseñó mucho y todo. La realidad es que, muchos lectores de la revista de CILSA, que tienen familiares o son personas con discapacidad, saben a lo que me refiero. Victoria es un ejemplo de vida. Hay un montón de personas como ella, pero mi hermana ha pasado por un montón de situaciones difíciles. Sin embargo, sigue tirando para adelante con una sonrisa. Más allá del amor descomunal, porque es la mujer más importante en mi vida, me enseñó todo.

¿Qué lugar ocupa la solidaridad en tu vida? 

La solidaridad es una de las cosas más importantes que podemos tener las personas. Hay que trabajarla todo el tiempo. Porque siempre hay más para dar. La realidad es muy loca y muy anecdótica, ya que es hermoso dar. Pero en realidad también es un acto egoísta, porque cuando das, te hace sentir tan bien que es más beneficioso para uno, que para el que recibe.

Hablando de valores, ¿quiénes te pusieron los cimientos?

Mis padres. En mi consideración son muy buenas personas. Tienen los valores muy fuertes y claros. Todo eso me lo inculcaron a mí y al resto de la familia.

A tu criterio, ¿los argentinos son solidarios?

Creo que los argentinos somos muy solidarios. La solidaridad no es algo que se aprende de la noche a la mañana. Es algo que, con el tiempo, uno se va dando cuenta de lo importante que es la solidaridad y lo que es dar. Por supuesto, lo que se puede y en el contexto que se pueda. Personalmente, trato de estar siempre que puedo.

LOS VALORES Y LOS FAMOSOS

¿Creés que desde la ficción se pueden inculcar valores?

Creo que el entretenimiento es muy saludable para todos. Porque la concientización del respeto y de lo que tiene que ver con las personas con discapacidad, son importantes. En definitiva, las ficciones tienen que servir para naturalizar más la discapacidad.

¿Es importante que los famosos brinden su granito de arena?

Por supuesto. Colaborar, aunque sea desde la difusión. Claro que está bueno hacer un aporte económico. Pero ya desde la difusión, es muy importante que colaboren. En mi caso, lucho, trabajo y colaboro con todo lo que tiene ver con las personas con discapacidad. Pero es porque me toca de cerca. Hay otras personalidades que se enganchan con otras temáticas, porque tienen más afinidad con tal o cual institución. Ver a los actores, músicos, deportistas y periodistas colaborando con las instituciones, suma mucho.

¿Sos de colaborar con alguna institución o causa?

Soy de colaborar. Pero si cuento con quién colaboro, pierde valor mi colaboración. Dado que no colaboro para que se sepa, sino porque me hace bien. En dónde, cómo y cuánto, me lo reservo.

A menudo se habla de la inclusión de las personas con discapacidad. ¿Pensás que hay mayor equidad o estamos lejos? 

Todavía estamos muy lejos. Hay algunos casos que se festejan y me alegro. Pero no estamos a la altura de otros países. Ojalá que con el tiempo cambie.

Joaquín, ¿qué mensaje le darías a los jóvenes que quieren dedicarse a la comunicación? 

El secreto máximo tiene que ver con estudiar, trabajar y ser humilde. Estudiar siempre. Y cuando digo trabajar, me refiero a trabajar por el sueño, trabajar por lo que uno quiere. Es casi imposible e improbable que, de la noche a la mañana uno consiga su objetivo. Es muy difícil, somos muy pocos los privilegiados que trabajamos de lo que nos gusta. Antes de llegar adonde llegué, recibí muchos no. Me indigné, estuve a punto de patear el tablero. Sin embargo, siempre tuve claro cuál era mi sueño, cuál era mi pasión. Y cuando digo humildad, me refiero a que siempre hay que tener las bases y los pies sobre la tierra.

Por Juan Ignacio Penlowskyj

Fotos Joaquin «Pollo» Álvarez