En el marco de la alianza que mantienen ambas instituciones.

Se llevó a cabo una jornada de capacitación en evaluación y prescripción de sillas de ruedas para mejorar la calidad en la asignación de la silla en todo el territorio nacional, dictada por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (IJSUD) destinada a voluntarios de todas las provincias del país.

La actividad se desarrolló los días 7 y 8 de marzo en la Estaca de la IJSUD en La Boca y estuvo a cargo de miembros del Programa Nacional de Entrega de Elementos de CILSA, que en este caso oficiaron de formadores, y de Matt Debell, responsable de carga del programa de sillas de ruedas en Argentina, Chile, Uruguay y Paraguay de la IJSUD.

“Es una fuerte apuesta que se realiza junto con la IJSUD y consiste en que 20 provincias de la Argentina estén representadas a través de gente que tiene un corazón especial y se quiere formar para prescribir sillas de ruedas. De esta forma logramos que en cada provincia haya una mayor efectividad en la entrega de la silla de ruedas y que cada uno de los que hoy reciben su certificado otorgado por los especialistas de la IJSUD puedan hacer más ágil este proceso”, señaló Silvia Carranza, presidenta de CILSA.

Por su parte, Gustavo Berta, Gerente de Proyectos de Ayuda Humanitaria de la IJSUD destacó el trabajo entre ambas instituciones: “estamos agradecidos de poder trabajar junto a CILSA en este programa. Llevamos 10 años de labor conjunta y este evento fortalece nuestras relaciones como asociados”.

Desde el año 2014, se busca formar a referentes locales, personas con voluntad de servicio y sentido de identificación con la causa social de la discapacidad de regiones donde CILSA dona sillas de ruedas pero no tiene presencia institucional. De este modo, se pretende dejar capacidad instalada en la región para captar las necesidades del colectivo con discapacidad local, y que además opere como agente multiplicador del mensaje de igualdad de oportunidades desde un paradigma inclusivo. Las acciones son posibles a partir de un trabajo en red de las personas que habitan estas regiones lo que permite una amplia cobertura nacional, detectando las regiones de mayor necesidad a partir de nuestro trabajo de relevamiento.

Testimonios

Ricardo Manuel López, voluntario de Misiones

“Trabajando en mi comunidad con el Consejo de la Niñez y con el Consejo de la Discapacidad y viendo tantas necesidades de elementos ortopédicos conocí a CILSA. En una oportunidad, llegaron a casa con la camioneta de la ONG, habían ido a Bernardo de Irigoyen sin conocer a nadie y salimos juntos a ver a los niños con discapacidad. La gente recibió la visita con mucha alegría. De este modo, a los dos meses se hizo la entrega. Cuando me llamaron para participar de este curso me sentí un privilegiado porque voy a poder prescribir una silla de ruedas y de esa manera colaborar con CILSA”.

Febo Sosa, voluntario de Chubut

“Soy kinesiólogo y fisioterapeuta y dirijo un hospital local ubicado cerca de la cordillera. Recibí la invitación de CILSA y fue muy enriquecedora. Decidí ser voluntario porque dentro de mi profesión veo las carencias de la gente y espero ser un nexo con CILSA”.