Fue uno de los beneficiarios de la entrega realizada el 29 de marzo en el Centro Cultural Falla

Ramiro Damián Uranga es un niño cordobés de 13 años, que vive con su mamá, abuelos, hermana y tío un primo en la localidad de Alta Gracia, ubicada a 36 km. de la ciudad de Córdoba.

Como consecuencia de una hipoxia perinatal, Ramiro tiene dificultades para desarrollar la marcha y el lenguaje; por lo tanto, necesita una silla de ruedas.

De lunes a viernes asiste al Centro Terapéutico CRECER de 9 a 16 hs, es decir, jornada completa. Allí desarrolla diversas actividades como hidroterapia. Le fascina salir a pasear, sobre todo los fines de semana, junto a su papá.

En septiembre de 2008 Ramiro recibió su primera silla de ruedas a través de CILSA. En ese entonces tenía 4 años, el tiempo fue transcurriendo y fue creciendo, lo cual hizo necesario un cambio en el tamaño de su silla de ruedas.

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