«Ahora que tengo mi silla de ruedas me gustaría ir a visitar a mis hijos, a mi nieta, tomar sol, arreglar mis plantas, salir a la vereda, ir cómoda al médico. Agradezco infinitamente a CILSA», expresó la cordobesa.  

Beatríz es una de las usuarias de silla de ruedas que el 4 de noviembre accedió a su elemento ortopédico gratuito en «Soy Beatriz Juana Domínguez, tengo 79 años y vivo en la ciudad de Córdoba. Pasé una hermosa infancia en Cosquín, donde vivía con mis padres y un hermano menor. También viví un tiempo en Rosario, provincia de Santa Fe. Soy jubilada de maestra y durante mis primeros años de juventud ejercí como suplente. También trabajé en el comercio. Enviudé hace 15 años. Hace aproximadamente 14 años, me asaltaron en la calle causándome traumatismos en todo mi cuerpo, sobre todo en mis extremidades. A raíz de eso debí someterme al reemplazo de ambas caderas y el brazo izquierdo nunca volvió a funcionar. Pronto a la recuperación he usado bastón, luego caminador. A partir de la pandemia, al no poder salir de mi casa, mi movilidad se resintió aún más, no permitiéndome desplazarme ni caminar correctamente. En los últimos meses recibo rehabilitación a domicilio ya que no contaba con la silla de ruedas que hoy tengo. Mi amiga Karina es quien diariamente me ayuda con la movilidad dentro de mi casa y me acompaña al médico».