Fueron beneficiadas 16 personas en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

 
 
 
Una nueva entrega de sillas de ruedas y otros elementos ortopédicos se realizó en la Estaca de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ubicada en la intersección de San Luis y Formosa.
 
En dicha sede se donaron 11 sillas de ruedas y cinco bastones canadienses y muletas a personas con discapacidad de Mar del Plata, Bahía Blanca, Mar de Ajó y Pinamar (para el caso de Bahía Blanca, las sillas de ruedas destinadas a niños fueron enviadas directamente por intermedio de la voluntaria local Mara Recondo).
 
En esta oportunidad estuvieron presentes referentes de la ONG y del espacio anfitrión, familiares y amigos de los beneficiarios y la joven Elizabeth Braun, alumna de la Universidad UCAECE a cargo de la recepción y atención de los beneficiarios en el marco de la cátedra Prácticas Profesionales Supervisadas.
 
La bienvenida estuvo a cargo de la directora de Asuntos Públicos de la Estaca, profesora Romina Carozzo Fernandez, quien expresó palabras muy cálidas a los presentes. Romina, quien calificó el encuentro como una hermosa reunión, fue presentada a los referentes de CILSA por el Señor Abel Kuhn, DAP Multiestaca de la IJSUD.
 
Por su parte, la Lic. Lucrecia Albornoz, coordinadora regional de Programas Sociales de CILSA, se refirió a la Organización que representa a nivel local compartiendo información sobre sus actividades por la inclusión.
 
Este encuentro solidario también contó con la participación de misioneros de diferentes países (Guatemala, Uruguay, Canadá, Brasil, Colombia, Chile, Estados Unidos, Paraguay, Perú y Bolivia), quienes ofrecieron una bella melodía interpretada con piano.
 
Tras firmar el comodato de recepción del elemento ortopédico, los beneficiarios se tomaron una fotografía individual y participaron de los talleres de cuidado y uso del elemento consignado.
 
 

Voces emotivas
 
Durante la jornada, familiares de los beneficiarios y misioneros de la IJSUD, manifestaron sus emociones por su participación en el encuentro solidario.
 
«Nuevamente renuevo mi agradecimiento a CILSA por brindarle a mi madre un apoyo más. Por su labor, ella tiene dos bastones que ayudarán a que vuelva a caminar otra vez. Gracias infinitas por su hermoso trabajo que es sentido desde el corazón», manifestó Sebastián Fraternali.
 
«Estoy muy agradecida porque Azul recibió una silla de ruedas, tan importante para el día a día», expresó Rosana.
 
«Le agradezco por las muletas para mi sobrino Lucas Gómez», sostuvo Carolina Guerra.
 
«Fue un placer colaborar con ustedes en este día. Es bueno saber que hay tanta gente preocupada por el bienestar de los demás. Que sigan sus esfuerzos y sepan que pueden contar con nuestra ayuda», manifestó Hawlett (California, EEUU)
 
«El amor mutuo mediante el servicio trae la unidad. Las familias son importantes para la sociedad y en la vida. Por cosas pequeñas, vienen grandes milagros», reflexionó De León (California, EEUU)
 
«Es un placer poder presenciar este acontecimiento en el que las personas logran cumplir sus sueños. Gracias por hacer posible esta oportunidad», expresó Marín (Chile)
 
«Muchas gracias por hacer lo que ustedes hacen. Es una oportunidad para todas las personas que necesitan ayudar. CILSA es una bendición para muchas personas», dijo Schiess (Utah, EEUU)
 
«Es genial que puedan ayudar así a las personas. El Señor está muy agradecido con lo que hacen», subrayó la Hna. Rosas.
 
 

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