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El mismo consiste en observar cómo se comporta un haz de luz cuando atraviesa ciertos líquidos, en este caso agua sola y agua con sal y leche.
En primer lugar, la docente dialogó sobre el efecto Tyndall y en qué circunstancias cotidianas podemos observarlo. Luego, para llevarla adelante, utilizaron varios recursos y elementos. Primero realizaron en una caja de cartón una abertura para colocar un recipiente con las diferentes  aguas, luego con una linterna pudieron observar el efecto que ocurría. Para concluir, registraron en el pizarrón lo sucedido.
El taller resultó interesante para los niños ya que les permitió ser científicos por un instante y con una actividad que disfrutaron mucho.