Los niños aprenden a cuidar el ambiente y a cultivar el ambiente.

De la mano de su docente, los niños del Hogar Calzada desarrollan una huerta orgánica a partir de la recuperación de un terreno contaminado. Entre las actividades realizadas se destaca la nutrición de la tierra para que sea apta para cultivo, conocimiento de las semillas, calendario y cuidado de siembra según las estaciones del año, riego diario y limpieza, observación de los procesos de crecimiento de los vegetales y frutos, hasta la cosecha, preparación y consumo de los vegetales.

A través de esta actividad los niños aprenden contenidos conceptuales y especialmente actitudinales, puesto que ponen en ejercicio el cuidado del medio ambiente y el amor por la naturaleza.

También cuentan con un gallinero en el que los chicos ejercitan la responsabilidad con amor al alimentar a los animales que luego les brindan comida para compartir en el Hogar de día o en sus casas junto a su familia.

Además, se practican permanentemente ejercicios de reciclado de materiales contaminantes, como tapitas de gaseosas, cubiertas de autos en desuso, transformándolos en objetos útiles y o decorativos del espacio.

El espacio natural del hogar constituye una herramienta para contribuir al desarrollo integral de la educación y salud de los niños.

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