Mediante talleres los niños aprenden distintas habilidades

Los niños del hogar Ringuelet participan del taller de cocina, en el que preparan galletitas, tortas, chipas, tortas fritas, pizzas, entre otras recetas. Durante el verano, la consigna se basó en pensar platos frescos que no llevaran cocción, como licuados, ensaladas y piononos.

Para la ensalada de frutas, cada niño peló y cortó naranjas, manzanas, frutillas, bananas, duraznos, peras y las unió en la gran olla que luego también fue la fuente de presentación. Mientras trabajaban en equipo, se dialogó sobre los saberes que cada uno tenía sobre cada tipo de fruta y compararon sus olores, gustos, texturas y consistencias.

Como cierre, compartieron este postre fresco, natural y saludable. Además, se confeccionará un libro de recetas.

Fundamentación

La cocina para los niños es una fuente inagotable de sorpresas y alegrías, y una oportunidad de aprendizaje. Se trata de una actividad que permite incorporar hábitos de higiene y alimentación, seguir instrucciones, esperar y tener paciencia, leer y escribir recetas como portadores de textos, organizarse, utilizar diversos utensilios de cocina y medición, y trabajar en equipo. Los niños no sólo cocinan para sí mismos sino para los demás, lo cual implica un gesto de cariño.

13420