Desde el Programa “Un niño, un futuro” se busca garantizar este derecho a través de diferentes actividades y talleres.

En los ocho hogares de Buenos Aires se cree fundamental reforzar y afianzar el cumplimiento de los derechos del niño. Uno muy importante es el derecho a la educación. Para garantizarlo, desde el Programa “Un niño, Un futuro” se busca generar ambientes donde se respete la libertad de creación y el desarrollo máximo de las competencias individuales, fortaleciendo los valores de la solidaridad, el respeto, la tolerancia, entre otros.

A través de talleres y actividades específicas se acompaña a los niños en su trayectoria educativa, guiándolos y otorgándoles las herramientas para logren un aprendizaje significativo. En este sentido, se desarrollan actividades de apoyo escolar y diferentes talleres para fomentar un desarrollo integral.

En el hogar de Morón, el taller de lectoescritura y matemática se realiza una vez por semana. En esta instancia, los chicos aprenden sobre lectura, escritura y matemática por medio de juegos didácticos, cuentos y otras actividades recreativas.

En el hogar de Béccar se desarrolla el taller Curiosos Viajeros, en el cual se trabaja sobre las características que poseen las provincias argentinos. A través de esta actividad, las docentes enseñan diferentes disciplinas (música, plástica, geografía, historia) y dan a conocer la importancia que tiene el acercamiento a otras culturas y tradiciones, teniendo en cuenta siempre el respeto y la tolerancia.

En junio el hogar Sarmiento comenzó a desarrollar el taller “Diversidad en la literatura: múltiples voces, múltiples historias”. Su eje se centra en leer en conjunto diferentes cuentos cuyo tema es la diversidad.

Por su parte, en los hogares Calzada, Lanús y Lugo se realizan talleres de literatura y lectoescritura con consignas innovadoras y vanguardistas, apuntando al acercamiento a la poesía como manera de conocer y expresar el mundo.

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