A partir de historias familiares y experiencias compartidas por los niños.

En continuidad con lo abordado en el “mes de la familia” y a partir de las anécdotas familiares que se compartieron en el libro viajero, se desarrolló una jornada de kermes de juegos actuales y tradicionales. Es decir, aquellos que practican los niños y aquellos que han practicado sus padres.

Tras charlar y conocer las historias, y considerando los festejos de cumpleaños y las travesuras de los chicos, se dio lugar a una tarde de kermes en la que se replicaron los juegos compartidos más valorados: tumbalatas, pesca-magic, poner la cola al burro, la mancha, búsqueda del tesoro, juegos de destrezas, de equipo, individuales y de competencia.

En este sentido, el intercambio de experiencias y las actividades realizadas dieron lugar a la posterior reflexión sobre la importancia que reviste lo lúdico como parte esencial de la niñez, como un derecho de toda infancia, en todas las épocas.

De este modo, los chicos de Pompeya disfrutaron con entusiasmo de un día especial ya que cada juego elaborado traía a colación una anécdota de alguno de ellos o de sus familiares, confirmando así que jugar es la actividad por excelencia de la infancia.

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