Los niños aprovecharon una estrategia diferente para disfrutar del agua.

Durante una semana los niños y profesores del hogar Polideportivo armaron una balsa para divertirse de una manera diferente en el agua.

En los días previos, recolectaron botellas, bidones, pallets, clavos, alambre y todo lo necesario para darle forma a la mini embarcación.

La construcción estuvo alentada por la ansiedad, empeño y dedicación del grupo. Una vez lista, la trasladaron hacia la pileta del complejo.

Fue indescriptible la emoción de los niños tras recorrer la pileta en la balsa y se alentaban entre sí a asumir desafíos acuáticos.

Se trató de una experiencia particular y entretenida para los chicos, ya que fabricaron su propio medio para trasladarse en el agua, jugar y divertirse mucho.

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