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Para comenzar, la jefa del Área de Discapacidad, licenciada Gabriela Juárez, dio la bienvenida  a los asistentes y realizó una breve introducción sobre lo que luego se iba a desarrollar en la charla.

La capacitación estuvo dirigida por cuatros disertantes: el profesor Romeo Fiorentini, quien posee experiencia en el trabajo de personas con discapacidad visual, que brindó algunas nociones sobre el desempeño de estas personas en diversas actividades y también en cómo se debe ayudar a una persona ciega en el caso de que concurra hasta el municipio; la licenciada Eliana Gutiérrez fue la encargada de conceptualizar la discapacidad mental e hizo hincapié, apoyándose en la Convención Internacional de los Derechos de las Personas con Discapacidad, en que lo correcto es comenzar a hablar de «persona con discapacidad» y no de personas con capacidades diferentes, incapacitadas, entre otras.  Este punto generó un gran debate entre los asistentes, quienes expresaron sus dudas respecto al tema.

Cada uno de los expositores brindó su visión sobre la utilización del término «persona con discapacidad», remarcando que de esta forma se respeta la condición de persona, sin importar la discapacidad que presente.
Luego de compartir un café, continuó con la exposición Nicolás, intérprete de Lengua de Señas Argentina, quien habló sobre la discapacidad auditivita, sus diferentes tipos y también sobre las personas sordas-ciegas. Se encargó, además, de aclarar ciertos mitos en relación a esta discapacidad y los presentes realizaron varias preguntas al intérprete, ya que la mayoría expresó haber tenido dificultades en brindar una buena atención a las personas sordas por no saber cómo reconocerla o cómo hacerse entender.
La temática de la discapacidad motriz estuvo a cargo de CILSA, a través de Eugenia Arias, comunicadora institucional. Previo a desarrollar el tema, se brindó a los asistentes una breve reseña del trabajo que nuestra ONG realiza y, al igual que el resto de los disertantes, se resaltó la importancia de la convención y de comenzar a hablar de persona con discapacidad, ya que de esta manera es posible comenzar a ver a la persona en vez de su silla de rueda, a su bastón o a su intérprete. Hecha esa breve introducción, se comenzó a desarrollar el tema de
discapacidad motriz, haciendo referencia a las diversas causas, a las posibilidades de desarrollo de las persona con discapacidad, el valor de dejar espacios para que pase una silla de ruedas, entre otras cosas. Eugenia también explicó las partes de una silla y dio algunos consejos
útiles para ayudar a las personas que las utilizan y recordó que al momento de hacerlo siempre hay que preguntarle antes si necesita ayuda y cómo puede hacerlo, ya que no todas las sillas son iguales.
Terminada la exposición, se debatió entre los presentes las posibilidades de desarrollar una vida autónoma que tienen las personas que poseen esta discapacidad, y comenzar a ver y reflexionar sobre las limitaciones.
En el debate generado, algunos presentes contaron experiencias personales con personas con discapacidad, ya sea por haberlas atendido en sus lugares de trabajo  o por ser familiar directo de éstas.
El encuentro fue muy productivo y valioso, ya que ésta es otra manera de lograr respetar el acceso de las personas con discapacidad a todos los lugares e ir abriendo los espacios ciudadanos.