Contó con la participación de 40 docentes de Educación Física de primaria y secundaria del distrito bonaerense.

El 25 de noviembre se realizó en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) una Jornada de capacitación sobre deporte inclusivo. La propuesta estuvo destinada a profesores de Educación Física, tanto de nivel primario como secundario del distrito escolar de Quilmes.

Participaron 40 docentes acompañados por un equipo de tres inspectores del área y una inspectora de Educación Especial. La actividad tuvo dos bloques.

La instancia inicial consistió en una mesa donde expusieron la Lic. Laura Cometto, entrenadora de Paravoleibol, y el coordinador de la regional Buenos Aires del Programa Nacional de Concientización de CILSA, Hernán Varas. Durante las presentaciones se proyectó un video de las distintas actividades deportivas que la ONG ofrece a las personas con discapacidad, se comentó sobre las Escuelitas de Iniciación Deportiva; y se pensaron las representaciones sociales y culturales del cuerpo y cómo influye en el curriculum que se enseña en las escuelas.

El segundo bloque se desarrolló en el gimnasio de la universidad y consistió en vivenciar dos deportes adaptados: básquet sobre sillas de ruedas y paravoleibol, con la colaboración de jugadores que se desempeñan en dichas disciplinas deportivas.

Emiliana Cabrera, jugadora del equipo de básquet sobre silla de ruedas de CILSA, explicó el uso de las sillas de ruedas deportivas y las reglas de ese deporte. Luego, invitó a los profesores presentes a sentarse en las sillas y jugar al básquet, formando dos pequeños equipos. Al anotar un tanto, cambiaban los participantes. La experiencia fue muy valiosa, ya que los docentes pudieron apreciar de una forma muy diferente el deporte al “poner su cuerpo”.

Para el momento del paravoleibol la dinámica fue similar. Se armó un partido donde dos atletas con discapacidad compartieron la cancha con otros 10 jugadores sin discapacidad, todos sentados en el suelo, tal como se practica ese deporte. La entrenadora explicó las reglas y dirigió los partidos que eran “a un tanto”, para darle la posibilidad a la mayoría de los participantes.

Por último, los docentes realizaron la actividad lúdica conocida como “Quemado”. Luego, se les propuso sugerir iniciativas para que el juego se adapte a dos alumnos ciegos. Así, los educadores pensaron modificaciones sin alterar la esencia del juego.

Los objetivos de esta jornada fueron compartir experiencias sobre prácticas de deporte inclusivo con personas con y sin discapacidad; brindar herramientas a los profesores de educación física para adecuar las actividades deportivas que desarrollan en sus espacios de docencia; generar un espacio para reflexionar sobre las propias prácticas desde un enfoque inclusivo; y vivenciar la práctica de algunos deportes adaptados.

CILSA agradece el espacio ofrecido por la comisión de Salud y Discapacidad de la UNQ, que realizó esta actividad en el marco del Programa de Accesibilidad Académica de la Secretaría de Políticas Públicas del Ministerio de Educación de la Nación.

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